El famoso dicho “una imagen vale más que mil palabras” se refiere a la noción de que una idea compleja puede ser transmitida sólo con una imagen, una imagen que descoloca y que queda grabada en nuestras mentes. El origen de esta expresión popular podría resultarnos reciente, aunque es en realidad originaria de la China antigua. En 1862 Ivan Turgueniev escribió (en Padres e hijos) “Una imagen me muestra de un vistazo lo que necesita docenas de páginas de un libro para exponer.”
Una imagen vale más que mil palabras, seguramente sea una de las frases más dichas y escritas, sobre todo en estos últimos tiempos donde la comunicación audiovisual dada por la tecnología nos abunda sobre manera. Sobre todo teniendo en cuenta el bombardeo publicitario que sobreestimula nuestros sentidos, podemos dudar de si una imagen vale tanto.

 A parte de que una imagen, una fotografía, una instantánea se refiere a eso; solo un momento que puede estar desconectado del contexto y de su historia. 
Todo depende de lo justa, profunda o provocadora que sea la imagen. Para valer más de mil palabras la imagen tiene que tener el contexto justo en el cual la podamos visualizar y focalizar en ella poniendo toda nuestra atención, que es requerida para que nos evoque algo significativo.  
También depende fuertemente de la imagen en sí misma, que sus personajes u objetos sean signos o símbolos con significado cargados de sentido. 


Por otro lado, las palabras generan frases, oraciones, teorías, relatos que pueden ser los pilares de la cultura, el pensamiento abstracto y la enseñanza. Por lo tanto, esta frase es cierta atendiendo al contexto y a cierto tipo de comunicación evocativa.(2012, 09). Una imagen vale más que mil palabras. BuenasTareas.com. Recuperado 09, 2012, de http://www.buenastareas.com/ensayos/Una-Imagen-Vale-M%C3%A1s-Que-Mil/5285660.html